Crecimiento personal un proceso intencional.

Frecuentemente he visto y vivido la creencia errónea de que nuestro crecimiento personal surge de forma espontánea conforme vamos avanzando en años en la vida. Muchos de nosotros creemos que solo con el hecho de sobrevivir el día a día nuestro crecimiento personal se desarrollara al ritmo que vamos creciendo.  

Recuerdo que hace años, yo tenía esa creencia que conforme pasaran los años las cosas se darían solas, con el simple hecho de hacer la rutina diaria dormir, alimentarme, ir a la escuela/trabajo, un poco de vida social y volver al inicio eso me llevaría a adquirir conocimiento necesario para poder tener un buen posicionamiento y una vida que todos deseamos. Es cierto que si adquieres aprendizajes de cada experiencia que tienes, pero no el  aprendizaje necesario para tener una superación personal saludable que te lleve a estar bien con tu mente y cuerpo. Que te lleve a un estado de realización.

He escuchado muchas veces que la vida es el mejor maestro y la verdad es que así lo es, ya que si no aprendemos la lección la vida se encarga de hacernos pasar por episodios similares hasta que aprendamos o de lo contrario siempre pasara lo mismo, es como aquella frase que dice:

“Loco es aquel que, haciendo siempre lo mismo, espera resultados distintos” Albert Einstein.

 Solo si buscamos constantemente e  intencionalmente la búsqueda de nuestro crecimiento personal es como sucederá.

Cuando entendemos que este proceso de crecimiento personal depende de nosotros y que necesitamos ser intencionales en el proceso, nuestros sentidos se sensibilizan a las oportunidades y aprendizajes que a diario se nos presentan.

Para esto hablaremos de los 5 pasos necesarios para convertir el crecimiento personal en un proceso intencional.

1- Crea tu proyecto de vida. (Plan de acción)

Define quien quieres llegar a ser y en cuento tiempo, define tu visión, misión y metas en la vida, marca tiempos en los que concluirás tus objetivos, proponte una meta, define tu porque y para que de tu existencia en este universo.

2- Determina que necesitas aprender para llevar acabo tu proyecto de vida.

Analiza que es lo que necesitas aprender para poder conseguir tu meta, cuáles son tus puntos fuerte y los débiles, recuerda que no porque seas bueno en algo es suficiente dejar esa habilidad sin alimentar, siempre hay que estar alimentando nuestras habilidades porque siempre hay algo nuevo que aprender.

Lectura de un libro cada dos meses o cada mes sobre alguna habilidad que necesitas para tu objetivo, sobre algo que enriquezca tu mente.

Toma un curso de actualización/ motivación. todo que sea enfocado a alcanzar tu objetivo.

Analiza que hábitos tienes que te ayudaran a alcanzar tu objetivo y cuales debes adquirir y dejar. 

3- Actúa

Es muy probable que en un principio no cumplas con tu plan de acción, pero no te desanimes con los pocos puntos que hiciste obtuviste talvez un mínimo casi no notable crecimiento, pero no tires la toalla, continua de nuevo si no lograste leer dos libros en 4 meses lee uno, y así constantemente hasta que te apegues a tu plan de acción. Recuerda que la perseverancia le gana a la inteligencia.

4.- ¡Arriésgate!  No busques el camino seguro. 

Deja a un lado tu zona de confort, tu zona segura.  Sal de tu zona y aventurate  en lo desconocido, si se te presenta alguna oportunidad, pero tienes el miedo de perder alguna comodidad como tu empleo, o tu reputación en x o y cosa por miedo a no poder cumplir con la siguiente meta que se te está presentando, jamás averiguaras que resultado habrías tenido, ni obtendrás el conocimiento que te podría estar dando esa oportunidad. Recuerda que no hay pero batalla que la que no se lucha.

-Toma retos que prueben tus habilidades y mejoren tus habilidades.

-Olvídate del miedo

-Deja atrás el no puedo.

       ¡¡Arriésgate!!

5- Motívate

El proceso de crecimiento personal no es fácil. Crecer duele y requiere disciplina. Por ello, necesitas motivarte a través del proceso.

-Revisa tu visión constantemente.

-Date pequeñas recompensas.

Recuerda que el no apegarte a tu plan de acción no significa que debes tirar la toalla, al contrario es un motivo más para apegarte cada vez más a él y poder obtener la mejor versión de ti.